LA AFIP INVESTIGA A MILAGRO SALA POR UNA MILLONARIA EVASION IMPOSITIVA

Según un informe del ente recaudador, la organización kirchnerista Tupac Amaru no pagó unos $180 millones en impuestos.

Mientras se aguarda que la dirigente social Milagro Sala preste declaración esta semana ante la fiscalía jujeña en el marco de tres causas en su contra, se supo que la AFIP investiga a la piquetera K por una millonaria evasión impositiva por parte de la Tupac Amaru, organización que lidera.

Durante el anterior gobierno de Cristina Kirchner, Sala y su organización recibieron millones de pesos que repartieron entre las Cooperativas que adscribían a su fuerza política. Además, la organización que comanda Sala funcionó como una "constructora encubierta" que se encargó de financiar decenas de casas sociales.

Según la información difundida por el diario Clarín, Sala recibió más de $500.000.000 entre 2013 y 2015 y habría evadido unos 180.000.000 pesos.

En el informe de la AFIP se destaca que en 2013 los ingresos fueron de $58.540.360 y se deberían haber tenido que pagar $20.384.126; en 2014 ganaron $257.283.200, con lo que deberían haber sido devengados $90.049.120 en el Impuesto a las Ganancias. Y por último, en 2015 obtuvieron $192.440.600 y no abonaron $67.354.210 por la tasa citada.

El documento advierte las irregularidades en el manejo que la Tupac Amaru hacía de la plata que obtenía del Estado nacional.

"Utilizaron dichos fondos discrecionalmente, también generando excedente, proveniente de las unidades no construidas, para su propio provecho, para su entorno familiar, para terceros, para el gasto político de la Organización y/u otros destinos", agrega el informe de la AFIP.

En otra parte del análisis que hizo la AFIP, manifiesta que la Tupac Amaru actuó "en la práctica" de modo similar "a una empresa constructora". Esta razón hizo que "aplicaran los insumos para su construcción en todas aquellas viviendas terminadas". También apunta contra las Cooperativas, entre las que se repartían la plata: "Se reitera que carecen de todo tipo de registración contable e impositiva, como así también de la documentación respaldatoria de los eventuales egresos".

Según el trabajo, la metodología era la siguiente: "Se tomó como utilidad gravada la totalidad del monto obtenido que, al no constituirse la vivienda, no resiste discusión alguna respecto de su apropiación en un 100% para el grupo en cuestión".

Según el fiscal Anticorrupción de Jujuy, Joaquín Millón Quintana, "no se pagaban impuestos al fisco, ni se hacían aportes a los trabajadores; la tenencia de las viviendas -las pocas que se hicieron- era precaria y, en base a diversos testimonios, se pudo reconstruir la operatoria de todas estas cooperativas, que se basaba en violencia física y psicológica de Sala".

"Hay una trama en la que se investiga el uso discrecional. Los fondos son de las casas sociales. Faltan analizar lo de los planes sociales y las escuelas. Trabajaron en un marco de descontrol", afirmó Millón Quintana en diálogo con la señal de noticias de cable TN.