El cantante Miguel Ángel Calderón, conocido popularmente como "El Rey Pelusa" sufrió en la noche del viernes un "infarto agudo de miocardio" mientras realizaba una gira en La Rioja. Recibió la asistencia del servicio emergencias en Aminga, fue derivado al Hospital de Aimogasta y finalmente al Hospital Vera Barros, desde donde una vez compensado se trasladó a una clínica privada.

Calderón se encontraba brindando un recital en la localidad de Amiga, Dpto. Castro Barros, donde al finalizar la presentación requirió la participación del equipo médico. La Dra Iris García, junto a la enfermera Filomena Nieto y el chofer Sergio Moreno, conformaron el equipo de emergencias perteneciente al Hospital de Anillaco, que cumplió con el protocolo de acción para estos casos, y brindó la asistencia inmediata al paciente que se encontraba  descompensado, con presión elevada y sudoración. Luego de tratarlo, se indicó el traslado al hospital de Anillaco, aunque por la negativa del cantante y su equipo, se trasladaron por sus propios medios en dirección a Aimogasta para continuar su presentación.

Al retomar los síntomas de malestar cambiaron de rumbo y se dirigieron al Hospital de Anillaco donde Calderón ingresó alrededor de las 20 horas. La Dra María Brizuela, realizó un electrocardiograma y determinó que el paciente se encontraba con un infarto, le administró la medicación correspondiente y lo canalizó trasladándolo rápidamente hacia el Hospital de Aimogasta, donde repitiendo el electrocardiograma se ratificó el infarto.

Finalmente tras ser asistido por el equipo de salud y coordinar con el Hospital Enrique Vera Barros, se decidió el traslado del paciente realizado hasta Capital con el Dr Cardiólogo Leonardo Salazar. Aproximadamente a las 21:15 horas ingresó a la Guardia del hospital y luego a Terapia Intensiva donde una vez compensado fue trasladado a la Clínica Mercado Luna. Cabe destacar que la respuesta al paciente fue inmediata en todos los niveles de atención, desde la unidad de emergencias apostada en Aminga, en el Hospital de Anillaco y en el Hospital de Aimogasta, lo que permitió una óptima respuesta del sistema de salud pública.