“Hubo dirigentes nuestros que explícitamente, públicamente se manifestaron en contra y tiempos después se manifestaron a favor, si lo hicieron públicamente sin ruborizar, sin avergonzarse, es evidente que no existe la idoneidad moral, y la entereza moral que nos garantice que no nos van a traicionar a los que no queremos minería, el temor a los panqueques, los que están de un lado y después se ponen del otro, creo que es una constante en la vida argentina”, dijo el Padre Federico Martínez.

Dialogamos con el Padre Federico Martínez, por la actividades programadas de Santa Rita de Casia, la que comenzó el domingo 13 de este mes con las novenas que van a las 20 hs, misas 7, 10 y 17 hs, y finalizaran el 22 con misas a las 7, 9 y 11 hs, y la procesión a las 17 hs, y al finalizar se realizara la misa solemne presidida por el Obispo Marcelo Colombo.

Como todos los años, el Padre pidió a la comunidad colaborar con ropa, ropa para bebe, leche, accesorios, artículos de higiene para bebe, pañales, “estos serán repartidos en los barrios nuestros, lo que es vivir la solidaridad con los que especialmente están sufriendo”, expreso el Padre Martínez.

Minería.

La máxima autoridad de la diócesis de Chilecito, manifestó estar en contra de la minería, a la que considera “yo estoy en contra de la explotación miera, tal cual se vino haciendo históricamente, y por muchas razones, hasta económicas, políticas, y son razones que sobran para justificar la oposición a la minería tal cual se plantea hoy, incluso por la historia de la minería”.

“La minería es una historia de muchos abusos, de mucha depredación, la conquista de América fue una empresa minera prácticamente, la conquista de África por Europa también fue una empresa minera”.

Tuvo la visita de los integrantes de la empresa minera SEARGEN S.A.

Afirma el Padre Martínez “nos encontramos algunas veces, y les decía que para ellos la minería el principio de inocencia no vale. Principios Constitucionales, esto que uno es inocente hasta que demuestre lo culpable, para ellos no vale, ellos son culpables desde hace miles de años, la minería es culpable, tienen que demostrar la inocencia, entonces hasta que no demuestren la inocencia, al menos yo estoy en contra”.

“Son muchos siglos de abuso, de los países actualmente desarrollados que gran parte de sus desarrollos lo construyeron sobre la explotación minera y de lo que hoy somos tercer mundo, o países en vías de desarrollo”.

No tienen autoridad moral

“No tienen mucha fuerza moral, no tienen mucha autoridad moral para plantearse con pretensiones de inocencia”.

Nos manifestó que tuvo un buen dialogo con los de la Empresa SEARGEN, “ellos venían mas bien y como después fueron a visitar casas, hicieron como una especie de timbreo también, y creo que la intención era venir a presentarse y presentar sus buenas intenciones, que yo los escuche, les dije lo mismo que te estoy diciendo a vos se los dije a ellos, no me convencen amí sus argumentos por todo lo que acabo de expresar y muchas otras razones”.

SEARGEN vinieron para conquistar voluntades

“Creo que el Famatina vale más para que lo contemplemos, y para que lo aprovechemos turísticamente o deportivamente, que para aprovecharlo en la minería, y muchas otras razones, y me parece que vinieron para eso, para ir tratando de conquistar voluntades, supongo yo”.

Me genera sospecha la minería

Opina  que le “genera sospecha la minería, y imagino que la gente  sospecha cierta, porque es histórico de  las posibilidades de que la corrupción, y el comprar voluntades se ven involucrados”.

Dirigentes panqueques que no tienen idoneidad moral

Seguidamente el Padre manifestó lo que el Pueblo en su conjunto dice “hubo dirigentes nuestros que explícitamente, públicamente se manifestaron en contra y tiempos después se manifestaron a favor, si lo hicieron públicamente sin ruborizar, sin avergonzarse, es evidente que no existe la idoneidad moral, y la entereza moral que nos garantice que no nos van a traicionar a los que no queremos minería, el temor a los panqueques, los que están de un lado y después se ponen del otro, creo que es una constante en la vida argentina”.